4 Domingo de Cuaresma
27 de marzo de 2022
Lucas 15: 1 – 3; 11-32
Los estudiosos de las Escrituras han dicho a menudo que esta parábola debería llamarse la Parábola del Padre Misericordioso. Él es claramente la imagen de Dios. Su hijo mayor está alejado del Padre; está atrapado por el legalismo de la Ley. Su hijo menor también está distanciado; vive una vida sin la ley de Dios en su corazón. El padre misericordioso es “imprudente” en su generoso amor por ambos. Él los llama a ambos de regreso a la casa, un símbolo del Reino. ¿Con quién nos identificamos, el hijo mayor o el menor? El Padre misericordioso también nos mira y nos espera.